La pérdida de audición inducida por el ruido es una de las enfermedades profesionales más comunes. Pueden producirse daños permanentes a niveles de ruido tan bajos como 85 dB (aproximadamente tan alto como el de una cortadora de césped). Por lo tanto, la ley exige protección auditiva cuando se trabaja en entornos ruidosos. Las normas europeas, como la EN 352, regulan los requisitos de los productos de protección auditiva para garantizar que proporcionen una protección fiable y sean cómodos. Pero, ¿qué protección auditiva es la adecuada para su entorno de trabajo? Aquí están los tres tipos principales:
1. Orejeras: protección integral
Las orejeras rodean toda la oreja con una cápsula acolchada y reducen eficazmente el ruido a través de su barrera física. Es especialmente adecuado para entornos de trabajo con niveles de ruido constantemente elevados, como en obras de construcción o en la industria. Las orejeras deben cumplir los requisitos de la norma EN 352-1 para que se consideren seguras y eficaces.
Ventajas:
- Ofrece un alto valor de aislamiento y protege eficazmente contra ruidos fuertes y continuos.
- Cómodas y fáciles de poner, incluso para jornadas de trabajo más largas.
- A menudo ajustable para garantizar un ajuste óptimo.
2. Protección auditiva con clip: perfecta para trabajar con casco
La protección auditiva con clip es una variante de las orejeras diseñadas específicamente para cascos. La protección auditiva se fija directamente al casco y es adecuada para trabajos de construcción, trabajos eléctricos u otras profesiones en las que se requiere un casco. La protección auditiva con clip también se rige por la norma EN 352-3, lo que garantiza que estos modelos ofrezcan la misma protección que las orejeras normales.
Ventajas:
- Combina protección para la cabeza y los oídos sin afectar el funcionamiento del casco.
- Fácil de poner y quitar según sea necesario.
- Ocupa poco espacio y se fija de forma segura, incluso en movimiento.
3. Tapones de protección auditiva: flexibles y discretos
Los tapones auditivos se insertan directamente en el canal auditivo y son ideales para entornos de trabajo con ruido moderado o cuando se requiere libertad de movimiento. Suelen estar hechos de espuma suave, silicona o cera y pueden ser reutilizables o desechables. La EN 352-2 regula los requisitos para los tapones de protección auditiva y garantiza que atenúen adecuadamente los niveles de ruido sin dejar de ser cómodos.
Ventajas:
- Ligero, compacto y discreto: ideal para trabajos móviles.
- Adaptable a diferentes canales auditivos gracias a materiales suaves y maleables.
- Muy adecuados para cambiar los niveles de ruido, ya que son fáciles de transportar.
La elección de la protección auditiva adecuada depende del entorno laboral y de los requisitos del puesto. Las orejeras ofrecen una protección completa, las versiones con clip son perfectas para trabajar con casco y los tapones para los oídos destacan por su flexibilidad y ligereza. Asegúrese de que su protección auditiva cumpla con las normas europeas; de esta manera estará siempre seguro. Porque: ¡Los oídos sanos no tienen precio!